6 de noviembre de 2007

El Secreto de Poblenou y (II)


18:30 En el solar.
Todos los trabajadores de la empresa de derribos ya se han ido a sus casas.
En el solar solo quedan cuatro personas en el interior de la caseta del arquitecto.
Por la valla abierta de la obra entra un Lexus negro hasta aparcar cerca de las casetas de obras. Del coche baja Amadeo Burgués con un mono de trabajo azul, un maletín de acero y un casco de obra con una luz frontal. No cabe dentro de sí; Justo al entrar a la que se usa de oficina, saluda con una gran alegría.

-Buenas tardes, señores, señorita. Están preparados para el descubrimiento del siglo?

El equipo esta formado por cuatro hombres y una mujer, entre ellos se encuentra Huesado, que es el primero a acercarse al recién llegado.

-Señor Amadeo, no veo como va a lograrlo.

-Tranquilo, he hallado varias posibilidades- Amadeo le guiña un ojo a Huesado palpándose las dos llaves, que ocultas bajo su mono, cuelgan de su cuello por medio de un cordel de seda rojo.- De hecho, creo tener un par de ellas infalibles.

-Pero, cómo que dos... ? En fin, permítame que presente al grupo...

-Si no le importa Huesado, siempre sé de antemano con quién me voy a relacionar. – A la vez que muestra una de sus mejores sonrisas, Amadeo va saludando a los integrantes del grupo.

-Seguro que le voy a sorprender, Huesado : El de las carpetas y libros es el historiador Eliseo Fernández. Encantado de conocerle.

Apretón de manos entre ambos y pasa al siguiente.

-Aquí el caballero de los anteojos es el experto en cajas fuertes Jorge Arquero, alias “Trepanador”. Es un placer conocer a un profesional de este sector. – Repite el gesto y pasa a la mujer.
-La única fémina del grupo es nuestra querida matemática y fotógrafa Amanda Riells. Es realmente fascinante su último libro de fotografías de niños en campamentos de refugiados.

Después de dar dos besos a la chica, Amadeo se acerca al hombre de la mesa y le da una palmada en el hombro.

-Y por último, sin ser del equipo pero necesario en esta ocasión esta el hombre con los planos en la mesa, Ernesto Sarnells el arquitecto del futuro edificio. Buena opción el hacer la fachada de cristal.

Al terminar las presentaciones, Amadeo se dirige al exterior seguido por el grupo.

En el extremo más lejano a la entrada a la obra, se encuentra un gran cráter con una parte más escarpada, en esta se adivina una vieja escalera que conduce a una considerable profundidad. Para bajar hay una cuerda de seguridad y una série de bombillas desnudas para mejorar la visibilidad.

-Señores y señorita, por favor sin cumplidos pasemos a las catacumbas, por favor guíenme hasta la caja.

Los integrantes del grupo se preparan para bajar con la ayuda de los arneses y los cascos con frontales. El único que no se mueve es Ernesto Sarnells.

Cuando Huesado le pregunta si bajará este contesta:

-Si no les importa, yo debería quedarme aquí fuera, el caso es que espero una llamada. Ahí abajo no hay cobertura. Si me necesitan pueden usar el teléfono fijo que hay en la cámara. Ese esta solamente conectado a otro terminal que hay en mí oficina.

Burgués,se fija en el cable que sale de la caseta hasta llegar cerca del cráter para bajar clavado por la vieja pared del túnel hasta perderse en el fondo.

-Sigamos el camino de baldosas amarillas, si no les importa iré el primero.- Dice Amadeo mientras empieza a bajar escalones como quién va a una fiesta.

El descenso es lento y dificultoso, la escalera después de tantos años oculta por un suelo falso de dos metros de grosor se ha ido erosionando a causa de las aguas freáticas y también en gran parte por recibir el impacto directo de las tareas de demolición de su anterior escondite.

Cuando por fin, exhaustos llegan al final del camino, todos se encuentran en una cámara hecha de ladrillos con techo abovedado de unos sesenta metros cuadrados, en la pared del fondo, iluminada por focos de obra, se puede observar un orificio de unos treinta centímetros de diámetro.

-¿Esta ahí dentro?- pregunta emocionado Amadeo.

-Así es, esta a unos veinte metros más al fondo, con el frontal puede ver la parte lateral, pero poco más.-Le contesta el historiador.

Amadeo se acerca lentamente al sitio del agujero, sus ojos se adaptan a la oscuridad del interior. Esta, apenas disminuye por la luz del frontal y de los focos.

Mientras, Huesado le va informando de la situación. Aunque poca atención le presta este, pues esta mirando todos los detalles de la cámara secreta.

-Por eso le dije que su abuelo no pudo encontrarla. Este refugio anti-aereo no fue censado en su momento, posteriormente se le añadió la cámara que descubrimos gracias a ultrasonidos. Solo hemos podido perforar este agujero, si lo hacemos mayor de ese tamaño podría derrumbarse todo esto encima de nosotros. Pero, Arquero opina que si ponemos una pequeña carga en el lugar exacto, la pared puede ceder y conseguir el paso de una persona.

Amadeo no escucha, esta pendiente de la pared. Esta seguro que quién hizo esto, calculó como hacer que la caja fuera accesible sin ayuda de explosivos. Pero... y si al hacer el agujero se había dañado el mecanismo?

De pronto, vio que entre los ladrillos más bajos había unas marcas como de cincelado y se dio cuenta del truco.

-Huesado, ¿ Han probado en empujar en lugar de cavar o de volarla?

-¿Cómo dice?

-Digo: empujar o estirar. No le ha pasado que a veces al querer entrar a una tienda no se fija en el cartel de la puerta y estira de ella en lugar de empujarla.

-Si, pero no creerá que toda esta pared es una puerta que con dos manos se pueda abrir, verdad?

-Ciertamente no es una puerta, pero si se fija estos ladrillos tiene marcas de que algo les ha pasado por encima. Algo pesado...

Al mirar alrededor, Amadeo comprueba que hay unas argollas de un palmo y medio de diámetro en la pared del lado opuesto a la escalera; Justo a la derecha del orificio. Tras mirar las cuatro, en una de ellas observa que hay una parte del ladrillo desencajada. Con las dos manos estira de la argolla con todas sus fuerzas. Nada.

-Que es lo que intenta señor Burgués?- pregunta Amanda.

-Ayúdenme creo que ha cedido un poco, pero tantos años sin usarla esta encallada.
-De que demonios habla?- dice el historiador.

-Que se ha movido un poco pero no lo suficiente. Piensan ayudar o me voy a romper la espalda yo solo?-Réplica Amadeo.
Los tres hombres le miran asombrados entre todos estiran de la argolla, cuando parece que todo es fruto de la imaginación de su cliente, la argolla empieza a ceder mostrando un eslabón seguido de otro, y un tercero empieza a asomarse.

-Vamos, señores que ya es nuestraaa!- grita Amadeo.

Cuando el cuarto eslabón sale para enseñar que aún hay un quinto, un gran ruido metálico retumba en la sala. En pocos segundos, todo el refugio se llena de polvo y escombros,con un gran estruendo.
Todos gritan y los focos se apagan. Solo los frontales siguen funcionando.

-¿Están todos bien?- Pregunta Amadeo con una voz que demuestra su alegría.

-cof...cof... bien. Es usted un chiflado. ¡Creí que no lo contaba!

-Me lo tomaré como un sí, señor “Trepanador”. Y los demás?

El resto del grupo, con toses de por medio, va respondiendo afirmativamente, nadie herido.
Cuando el polvo se aposenta y la visibilidad casi es perfecta Amanda grita asombrada:

-Qué es eso?

Todos se fijan en la pared donde había el agujero. Este ha sido agrandado por algo que ha atravesado la pared a gran velocidad y con fuerza.

-Al parecer nuestra querida cajita es en realidad una vagoneta montada en unos raíles que la llevaron desde el exterior hasta quedar alojada en una catapulta que se acciona con esa cadena.- Amadeo esta señalado a la argolla y sus eslabones.- El autor de esta jugarreta ya tenía calculada la fuerza necesaria para romper la pared sin hundir el techo. Estuvo practicando, de ahí las marcas en los ladrillos de abajo.

-Será ca..ón! Con tantos años abandonada esa cosa podría haber hundido todo esto. ¡Yo me largo, que tenga un buen día señor presidente de teles!

-Señor Arquero. Comprendo su enfado, pero quiere ver como abro esta pequeña maravilla sin tener que usar sus servicios?

-¿Que quiere decir?

Amadeo se acerca hasta la caja y la acaricia con unos dedos temblorosos.

-Puedo abrir esta caja ahora mismo. Dígame, ¿Cómo se puede hacer sin usar nada que pueda dañar la cerradura?- Amadeo parece estar como un mago tutelando a unos niños para que entiendan su actuación.

-Solo la llave original y en este caso le aseguro que serán llaves muy originales.- el experto en cajas fuertes, sonríe mostrando las dos palmas- Así que dudo que no las pueda encontrar por aquí...

-Nadie dijo que las llaves estuviesen perdidas, querido amigo- Amadeo con un gran gesto teatral saca las llaves de su cuello- Si no lo recuerdo mal, les contraté para encontrar la caja. No tenía por que explicar el resto de los detalles. Aunque reconozco, que en parte era por falta de conocimientos. Estas llaves estaban en poder de mi padre, hasta que yo le substituí del cargo en la empresa. Y ahora vamos a probar si nuestros esfuerzos han valido la pena.

Amadeo con manos temblorosas coloca la llave larga en la cerradura. Encaja como un guante y al parecer los años encajada, no habían dañado el mecanismo. Esta gira con suavidad. Después coloca la segunda más corta y hace lo mismo que la primera, sin problemas. Un chasquido metálico confirma que la cerradura ha sido vencida. Ahora solo quedaba girar la rueda.

Esta también cede con facilidad, Amadeo no se lo puede creer. Todo estaba siendo sencillo. En demasía, quizás hubiera algún truco.

-Bueno, por fin lograremos descubrir si aquí hay lo que mi familia ha buscado a lo largo de tantos años.

Amadeo mira en el interior de la caja y encuentra un pequeño maletín de cuero casi podrido. Al abrirlo casi se le desintegra en las manos. Dentro solo hay un hule envolviendo lo que parece un motón de papeles.

-Maldición! ¡Esto no es! ¡Maldito seas, Leandro! Huesado! Quiero que busquen ahí- Amadeo señala el interior de la cámara donde se encontraba la caja fuerte.-Puede que esto sea un cebo para los ladrones, creo que esta aquí, búsquenlo!.

Mientras Amadeo coloca los papeles en su maletin.Esta de espaldas a todos, pero se puede apreciar que sus manos tiemblan.

-Pero Señor Burgués que buscamos?

Amadeo levanta la cabeza si volverse. Su voz es fría como un témpano:

-Le aseguro Huesado... Que cuando lo encuentren, sabrán lo que es. Muévanse! Yo me llevaré esto por si nos pueden ayudar a buscar mejor.

Amadeo se gira y con un empujón cierra la puerta de la caja. Se dirige hacía la salida, cuando Huesado se interpone y le pone una mano en el hombro.

-Y que le decimos a la constructora. El arquitecto se espera ahí arriba para poder firmar a la renuncia de nuestros derechos. Me dijo que nos ibamos hoy, y ellos podían comenzar con la obra!.

Amadeo coge por el cuello al detective. Nadie se mueve, todos estan en tensión.

-Yo me encargo Huesado, pero usted junto los otros, quiero que busquen hasta el último rincón.

Suelta a Huesado y por un momento esta a punto de golpearle en el estomago, pero se contiene.

Amadeo asegura el arnés a la línea de vida para ascender. Cuando esta a medio camino de la subida se saca un pequeño llavero del bolsillo. Oprime un botón rojo que hay en el llavero y sigue su ascensión.

Segundos antes de llegar a la superficie una explosión retumba en las entrañas de la tierra. Amadeo se encuentra a dos escalones para salir, cuando del cráter se escapa una nube de polvo que le rodea y le hace caer. Esta columna de polvo y escombros es como un geiser, nacido del ya derrumbado refugio.

El arquitecto ha salido disparado de su oficina para encontrarse con un Amadeo de rodillas, cubierto de polvo y llorando.

-Dios mío! Les dije que nada de explosivos, pero ese imbécil de Arquero dijo que controlaba... se ha venido todo abajo, yo venía para informarle que habría una pequeña explosión. Y miré ahora. Dioooos que tragedia!

4 comentarios:

Katty dijo...

Me encanta que haya acción en la blognovela :)
Por desgracia distintos asuntos me impiden ahora bloguear activamente.
Besos para todos y todas, insomniac people xD

Juan Manuel dijo...

Jó, B.J. ¡Vaya post! Me pregunto si para inspirarte no te has pasado por Hospitalet, por las obras del AVE...

... y a ver si se anima alguien más a colaborar, que me parece que, de momento, sólo somos tres, así que para quien lea esto, pues va a ser que sí; que esta es una clara invitación a "postear", que esto más que un club parece un "petit, molt petit comité"...

Blackjoker dijo...

Si digo la verdad ni se me había pasado por la cabeza lo del AVE. En realidad,esta trama se me ocurrió hace mese, excepto lo de la caja... ya veremos como lo vamos solucionando entre todos.Pro cierto es que se este esperando a que la raio se abra para intoducir a su personaje, que no sufra. Hoy voy a empezar con : LA OPERACIÓN TUNO. Besos para todos. BJ.

Rita ♫ dijo...

Ya me pondré a tono con la novela...
Me pareció una idea genial.
Blue!!!
Por casualidad me metí en tu blog y vi estos nuevos enlaces. No sabía cómo comunicarme contigo, pusistes privado el Blog ¿cómo estás?
Saludos al resto del equipo